jueves, 27 de octubre de 2011

Carpinchos, Gliptodontes y otro fosiles en Peninsula Valdes

Carpinchos, Gliptodontes y otros vertebrados fósiles de la Península Valdés

22/10/2011 ; Casa de la Cultura de Pto. Madryn.
Dra. María Teresa Dozo; CENPAT

Hace 20 mill de años hubo una gran invasión marina producto de un hundimiento de la costa atlántica coincidente con el surgimiento de la Cordillera (reacomodamiento de las placas). El mar patagoniense cubrió parte de las actuales tierras de Argentina incluyendo la costa Sur de Buenos Aires, de Río Negro, de Chubut y de Santa Cruz. Un manto de sedimentos marinos de color blanquecino caracteriza la Formación Gaiman (donde se observan fósiles de tiburones, pingüinos, delfines carnívoros y ballenas), tipica de Bryn Gwyn y de Cerro Avanzado.
La última trasgresión marina, esta vez del mar entrerriense, ocurrió hace 10 mill de años y también incluyó la costa de Chubut, originándose un nuevo deposito de sedimentos marinos, esta vez de color ocre que es la Formación Puerto Madryn distinguible en nuestras bardas acantiladas en el estrato superior. (Estas invasiones marinas se dieron varias veces (más de diez) en diferentes eras geológicas. Hace 40 mill de años (Eoceno) el mar avanzó sobre la Patagonia que era una extensa llanura húmeda arbolada similar a las africanas con temperaturas elevadas (fósiles de mamíferos y de avispas) constituyendo la Formación Sarmiento). La formación Puerto Madryn tiene una rica malacofauna: ostreas, gasterópodos, turritelas, shell y vertebrados: peces, focas, pingüinos (Playa Villarino), dientes de tiburón, ballenas, delfines. Todo esto ya se conocía hace diez años, pero por entonces aparecieron restos fósiles nuevos y sorprendentes en la zona de Punta Delgada, sobre la costa en la Ea. La Pastosa. Esta vez no eran fósiles marinos sino de ambiente terrestre, concretamente mamíferos del genero de los carpinchos que en “Rincón Chico” descubrió por casualidad Claudio Campagna en una de sus jornadas de observación de elefantes marinos. Encontró una porción de cráneo, una mandíbula y dientes. Estos fósiles de carpinchos se hallaban en los niveles superiores (más nuevos) del acantilado que se denominan niveles rionegrenses porque corresponden a ambientes fluviales (de agua dulce). Al avanzar en la exploración, rescatar los bochones de yeso y estudiar los restos fósiles en laboratorio, encontraron muchos más cráneos (vivían en familias), partes de esqueletos, vértebras, fémures, húmeros, pelvis que correspondían a carpinchos de diferentes edades lo que surge del análisis de la dentición. Éstos carpinchos fósiles eran muy similares a los actuales (hicieron moldes intracraneanos para comparar los encéfalos) pero más chicos (la mitad de tamaño) y constituyen los ejemplares más australes que se han encontrado (hasta entonces se habían encontrado hasta Río Negro).

Carpincho adulto

En ésta asociación faunística de ambiente terrestre hallaron también fósiles de Gliptodontes, grandes armadillos con caparazón articulado en osteodermos (placas) que tienen gran valor sistemático porque estos tienen 10 mill de años (también aparecen en la formación Ituzaingó de Paraná, Entre Rios) mientras que restos de Gliptodontes hallados en la Pcia de Buenos Aires tienen 10.000 años.

Gliptodonte


Fragmento de una coraza de gliptodonte, Museo de La Plata, Argentina.
Ejemplar fósil de un Gliptodonte


También se hallaron restos de armadillos similares a nuestros piches y peludos, con caparazones de placas en bandas articuladas por membranas y un diente al menos de un Milodonte, emparentado con los osos perezosos y los Megaterios (mamíferos pilosos similares a osos).
1. Mylodon Robustus


También se hallaron huesos que corresponden a ungulados ( son mamíferos placentarios que se apoyan y caminan con el extremo de los dedos revestidos de pezuñas (o descienden de un animal que lo hacía). Son ejemplos el caballo y la cabra. Se trata del grupo de mamíferos más diverso que existe en la actualidad. Los últimos hallazgos fósiles y genéticos indican que los cetáceos deberían ser considerados, aunque parezca increíble decirlo, como ungulados descendientes de los Artiodáctilos), de un animal del grupo Lyptopterma similar a un caballo con trompa denominado Macrauchenia.

Macrauchenia

Hallaron además restos fósiles de un ave rapaz que predaba el ecosistema fluvial hace 10 mill de años y que era muy similar a la actual águila mora de Patagonia. Y restos de un Pato Siriri, el más antigüo de Patagonia. Y falanges de Fororraco
Carlos Ameghino hallo los primeros restos de un ave gigantesca llamada luego Phororharcos Longissimus el nombre castellanizado deriva de phorusrharcos, que en idioma griego significa" que lleva pico "

Florentino Ameghino creyó al principio que se trataba del extremo de un pico desdentado y lo describió como tal. Una expedición del museo hallo nuevos restos más completos, y el mismo Ameghino pudo efectuar nuevos estudios. Era sin dudas una de las aves más extrañas y terribles que haya habitado el planeta. Cuando se le examino el cráneo de 65 centímetros, fue lógica su atribución a un edentado anómalo. Fueron aves corredoras carnívoras que habitaron en la Argentina durante unos 50 millones de años, desde el eoceno hasta el plioceno.
Están relacionados con las Chuñas, tenían una alzada que vario entre los 50 cms y más de 2 metros. (según la especie) pero dentro de esta diversidad de tamaños, todas las especies compartían hábitos carnívoros, incluidos los carroñeros tenían una adaptación a la carrera, con una pérdida total o casi total del vuelo.
Se encontraron también bagres de río que aparecen en este caso demasiado al sur de su zona de dispersión natural, concluyéndose que se trataba de un ambiente mucho más cálido y húmedo que el actual, una especie de ecosistema fluvial con delta similar a la actual Bahía San Blas.

Origen del hombre en la Patagonia

Orígen del hombre. Evolución y su llegada al extremo Sur de América

Cátedra Abierta de Paleontología (UNPSJB)
Dr. Rolando González - Dr. Marcelo Tejedor – Dr. Diego Poll


El estrecho de Bering separa América de Asia. La teoría más aceptada indica que por allí entraron los primeros hombres que llegaron a América.
El poblamiento de América es el proceso por el cual se diseminó la especie humana en el continente americano. Los científicos no tienen dudas de que los seres humanos no son originarios de América, por lo que ésta fue poblada por hombres provenientes de otra parte. La evidencia paleoantropológica apoya la hipótesis de que los humanos llegaron a América procedentes de Siberia, en el extremo noreste de Asia.
Desde el punto de vista de la teoría del poblamiento tardío, los paleoamericanos entraron al continente durante la última glaciación, que permitió el paso hacia el Nuevo Mundo a través de Beringia. Este evento ocurrió entre 14 mil y 13 mil años A. P. Por otro lado, la teoría del poblamiento temprano dice que los humanos llegaron a América mucho antes, basados en el descubrimiento de restos cuyos fechamientos por carbono 14 dan una antigüedad mayor que 14 mil años A. P. A la investigación paleoantropológica se suma la información producida por la genética, que ha servido para reforzar algunas conjeturas sobre el origen de los americanos.
En general, se considera que la mayor parte de los indígenas americanos son descendientes de un grupo único proveniente del noreste o el oriente de Asia. Los pueblos de habla na-dené son descendientes de una segunda ola migratoria que se estableció en el norte de América, mientras que los esquimales llegaron al continente en el flujo migratorio más reciente. Después que los paleoamericanos entraron al continente, el paso de Beringia fue cubierto nuevamente por el mar, de modo que quedaron prácticamente aislados del resto de la humanidad. Salvo el caso de una breve colonización vikinga en la costa de Canadá y Groenlandia, no hay evidencia contundente que respalde un posible contacto transoceánico entre la América precolombina y el resto del mundo.

La teoría de la evolución de Charles Darwin (1809-1882) desarrollada tras su extendido viaje a bordo del HMS Beagle (1831-36) se basaba en un árbol evolutivo con un tronco común correspondiendo las distintas especies a las ramas y ramitas. En 1859 publica Darwin “El origen de las especies” y teoriza sobre los distintos mecanismos de evolución que llevaron a crear inmensas variedades de seres vivos que tienen un origen común.

Evolución de los Primates
En la Patagonia hubo Primates pues hay registros fósiles de Haplorrinos del período Cretácico de la Era Mesozoica aunque la mayor cantidad de fósiles se corresponde con el Eoceno, período Terciario, Era Cenozoica.
Los haplorrinos (Haplorrhini, del griego haplos, "simple", y rhinos, "nariz"), son un amplio suborden de primates entre los que se incluye el humano. Se llaman así porque carecen de una membrana alrededor de las narinas (rinario) y de vibrisas en el hocico, al contrario que los primates estrepsirrinos (Strepsirrhini) como los lémures. Estas dos características aparecen también en muchos otros mamíferos: ratas, perros, etc. El rinario suele estar dividido verticalmente en dos secciones y hay autores que consideran el surco de debajo de la nariz en Haplorrhini, vestigio de esta segmentación.
Todos los haplorrinos poseen un útero de cámara única, a excepción de los tarseros, que poseen útero bicorne como los estrepsirrinos. Suelen parir una única cría y el tiempo que pasan con ella es más largo que el de los Strepsirrhini. El cuerpo además tiende a ser más grande que en los Strepsirrhini y poseen un diámetro cerebral mayor y una visión más desarrollada, distinguiendo colores y llegando a ser casi todos diurnos.

Estos primates de Patagonia no tuvieron nada que ver con la evolución del hombre que está ligada a la evolución de los primates del viejo mundo. A pesar de ser formas de vida tropicales, existen fósiles en Patagonia demostrando con ello cuanto cambió nuestro clima en las distintas eras geológicas. Actualmente pueblan las selvas de América como el Amazonas y presentan gran diversidad con un registro de 16 géneros diferentes. En Sudamérica el registro fósil más antigüo está en Bolivia y el segundo en la Patagonia (Homúnculus patagonicus) . Los siguientes por orden de antigüedad están en Chile, Colombia, Cuba y recién después en Brasil. Hasta ahora se hallaron 29 fósiles de Platirrinos de unos 26 mill de años y unos 20 géneros de 20 a 10 mill de años.
El Homúnculus Patagonicus lo encontró Ameghino en 1891 en Chubut, en la Pampa de Sacanana. Sobre la costa atlántica de Santa Cruz, en los acantilados, se encuentran fósiles de primates y también en la zona intermareal. En Gaiman hacia 1951 se halló un fósil de Dolichocebus gaimanensis. En Santa Cruz hay una importante formación llamada Pinturas caracterizada por gredas blancas, que presenta fósiles de 17 mill de años. El Soriacerum ameghinorum de 1987 tiene molares adaptados para masticas frutos duros y hay allí un cerro llamado “de los monos” por los registros fósiles de primates. En el Norte de la ría de Gallegos hay también restos fósiles de primates en la Ea. Killik Aike Norte, en las barrancas costeras, en un estrato de cenizas volcánicas de 16,5 mill de años. En la Gran Barranca del lago Colhué Huapi se hallaron fósiles de primates de 20 mill de años.
Es difícil – con los conocimientos adquiridos hasta el presente – especular sobre la forma en que llegaron estos primates a la Patagonia ya que no existían “puentes” con el viejo mundo hace 20 mill de años. La elevación de la Codillera hace 15 mill de años cambió el ecosistema y se dio una dispersión y migración por el Oeste hacia el Norte, a lo largo de la Cordillera porque la transgresión del Mar Paranaense inundó el Este y Centro de la actual Patagonia.

Durante gran parte de los períodos Paleógeno y Neógeno, como consecuencia de la formación de la Cordillera de los Andes, la placa continental sudamericana -Patagonia incluida- sufrió enormes esfuerzos de contracción y extensión, que elevaban y hundían el terreno intermitentemente. Los hundimientos permitían que el océano Atlántico ingresara al continente, depositando sedimentos cargados de restos de organismos marinos.
Hace entre 5 y 14 millones de años se produjo la última gran ingresión atlántica, que invadió la mayor parte del actual territorio argentino. Los fósiles depositados por esta ingresión se encontraron por primera vez en las barrancas del río Paraná, unos 1000 kilómetros al norte del límite septentrional de la Patagonia. Es por ello que al mar que cubría la Argentina en esa época se lo llama Mar Paranaense.

Los Homínidos son monos del Viejo Mundo integrados en los Catarrinos. (Los catarrinos, también llamados cercopitecoideos, son unos primates del suborden de los antropideos, habitantes del hemisferio oriental, con tabique internasal delgado aberturas nasales dirigidas hacia abajo y dentadura idéntica a la humana en número de dientes y fórmula dentaria. Tienen callosidades isquiáticas y carecen de cola, o cuando la tienen nunca es prensil. Comprende las familias de los cercopitécidos y símidos)
Son Homínidos los Gorilas que hace 9 mill de años se diferenciaron dando lugar al “linaje del hombre”. Los Chimpancés se diferenciaron hace 6 mill de años y el Humano hace 0,2 mill de años con varias especies que se extinguieron con el tiempo.



En el Sahara se halló el Sahelantropus Chadensis de hace 6 mill de años y a partir del mismo aparecieron fósiles más “modernos”.
En las selvas tropicales hallamos el Gorila que tiene un marcado dimorfismo sexual, viven en familia, aprenden lenguaje de signos y son vegetarianos.
En las selvas tropicales pero también en sabánas arboladas, hallamos los Chimpancés que tienen 3 o 4 subespecies, comen vegetales, termitas y pequeños mamíferos, poseen grandes capacidades cognitivas potenciales y hasta aprendizaje de lenguajes, tienen reconocimiento en el espejo e incluso fabrican y usan herramientas.
De los Homínidos más antiguos tenemos al Australopithecus aforensis de hace 3,5 mill de años cuyos restos se hallaron en las barrancas del Nilo y en Etiopía; caminaba erguido en dos patas. En el sur de África, en Transvaal, evolucionó el Australopithecus africanus hace 3 mill de años con un cráneo más humano, vivían en cuevasen un hábitat de sabana abierta. También tenemos a los Parantropus de 2 mill de años que se parecen más a los gorilas que los Australopithecus y habitaban lo que es hoy Kenia y Tanzania. En esta misma zona, en el valle del Rif del Bajo Nilo, se hallaron restosde pariente humano más antiguo que fue el Homo hábiles de 1,5 mill de años. El Homo erectus habitó Siria, India, China, todo el SE asiático e Indonesia hace 1,8 mill de años y hasta hace 0,3 mill de años; medían 1,80 m de altura y desarrollaron la industria lítica Achilense que era de 2 fases, simétrica. Homo Heidelbergensis y H. Neanderthalensis (0,8 – 0,2 mill años) son estadios pre-neanderthal hallados desde Portugal hasta Ucrania y también en el Norte africano, era época de glaciaciones y sobrevivían refugiándose en cuevas en las zonas más cálidas (donde hoy día veraneamos) pero también tenían adaptación para climas fríos como los grandes senos nasales.


Aparece el ser humano en el período cuaternario de la era cenozoica

Se puede asimilar la migración con la difusión cultural, que es mucho más rápida que la evolución genética. Hubo muchísimos cambios culturales que condicionaron la evolución del hombre. Con respecto a los alimentos, los centros de orígen de las especies vegetales (maíz, papa, etc) no son hoy en día las zonas agrícolas más excelentes. Y por ejemplo siendo el maíz un alimento tan destacado e importante a través de la historia, sin duda las poblaciones que tenían capacidad de producir amilasa para digerirlo, se beneficiaron y gozaron de selección positiva con respecto a las poblaciones que no la tenían. La evolución cultural es el mayor factor de cambio. “El medio ambiente cultural es más importante que el natural”. Al respecto, los primeros españoles llegados a América se preguntaron sobre el orígen de los aborígenes de las diferentes regiones porque si bien correspondían todos a un mismo tipo de homínido, la diversidad cultural es enorme, especialmente en lo lingüistico.

Veamos los hallazgos registrados en América del Sur y la datación correspondiente:

13.000 años de antigüedad en Monte Verde, Chile, frente a Chiloé. (Monte Verde es un importante yacimiento arqueológico descubierto en 1976. Es un asentamiento humano del pleistoceno tardío ubicado en la Región de Los Lagos, en el sur de Chile. Es, con una edad de 14 800 años antes del presente, uno de los asentamientos humanos más antiguos descubiertos en toda América).

10.000 años de antigüedad en el sitio Tres Arroyos de Tierra del Fuego. Fijarse que el Estrecho de Magallanes que separa la isla del continente se formó hace 8.000 años; es decir que la isla estaba habitada 2.000 años antes y eso explica las diferencias grandes entre los Tehuelches continentales y los pueblos de la Isla: Onas, Yamanas y Alacalufes. (se recuperó un esqueleto humano completo y articulado. El mismo corresponde a un individuo de sexo posiblemente femenino, cuya edad estaría entre 20 y 24 años Se hallaba genuflexionado sobre su lado derecho. Su estado de preservación es relativamente bueno; las piezas óseas presentan un aspecto muy porótico y las piezas dentales están todas presentes, con marcado desgaste y exposición de dentina secundaria).

6.000 años de antigüedad fósiles en golfos patagónicos.

Es significativo que las poblaciones en la Patagonia eran de una bajísima densidad de individuos:4 individuos cada 100 km2 y esto está en estrecha relación con la baja productividad de los ecosistemas.

Mares,dinosaurios y bosques del pasado patagonico

Mares, dinosaurios y bosques del pasado patagónico

Cátedra abierta de Paleontología (UNPSJB) 25/8/2011
Dr. Ignacio Cappa; Dr. Diego Poll


Los fósiles más antigüos que se encontraron en Chubut son de los períodos Carbonífero (hace 300 a 400 millones de años: bosques de helechos y reptiles) y Pérmico (hace 290 millones de años: aparecen los primeros dinosaurios) de la Era Paleozoica. En cuanto a la era Mesozoica, no hay registros de fósiles del período Triásico, pero sí de los períodos Jurásico y Cretácico existiendo de ahí en más un registro continuo hasta nuestros días.
El primer mapa geológico de la Patagonia lo realizó Charles Darwin hacia 1844. Desde allí, hasta los mapas del Segemar que se utilizan actualmente, pasó un largo recorrido.
Desde el Eón Precámbrico (4650-900 millones de años) la litósfera sólida conformando “placas” se apoya en una capa de convección magmática y esas placas, que están en permanente movimiento, fueron migrando a lo largo de las eras geológicas: Pangea, Gondwana y distintas migraciones continentales.


Distribución de los continentes hace 470 millones de años durante el Ordovícico Medio, antes de la formación de Pangea. Los tres pequeños continentes son Laurentia, Siberia y Báltica, mientras que el más grande es Gondwana.
Durante el periodo entre finales del Precámbrico y el Paleozoico la mayor parte de la evidencia de la historia temprana de la Tierra fue destruida por la erosión. Desde el inicio del Paleozoico, los mares poco profundos invadieron los continentes.La configuración de los continentes era muy diferente de la actual. En primer lugar, en esta era se dan al menos dos orogenias, la Caledoniana (durante el Silúrico superior) y la Herciniana (en el Permocarbonífero), que afectaron a toda la superficie terrestre, generando cadenas montañosas como, por ejemplo, el macizo Hespérico en el hemisferio norte; aunque como se ha dicho, sus huellas se detectan por todo el globo.
De la última parte de la era Paleozoica, de los Períodos Carbonífero y del Pérmico, son los mares y las plantas fósiles más antigüas que se encontraron en la Patagonia. Se encuentran en la precordillera chubutense, en Colán Conhué, en las Sierras de Tepuel cerca de Tecka y en Nueva Lubecka en la zona del río Genoa. Aquí hay un yacimiento de sedimentos marinos (Cuenca Tepuel-Genoa) de 7 km de espesor estratigráfico y en Nueva Lubecka hay fósiles continentales. También existen fósiles de estos períodos geológicos (Carbonífero y Pérmico) en Rio Senguerr. Llegando al río Genoa, de Norte a Sur, sobre la ruta 40 se observan afloramientos de rocas oscuras donde se encuentran fósiles de invertebrados marinos originarios de una invasión marina desde el Oeste. Durante la era Paleozoica hubo también una época de hielo y la disposición de los continentes era muy similar a Pangea.
Pangea (Pangaea) fue el supercontinente formado por la unión de algunos continentes actuales que se cree que existió durante las eras Paleozoica y Mesozoica, antes de que los continentes que lo componían fuesen separados por el movimiento de las placas tectónicas y conformaran su configuración actual. Este nombre aparentemente fue usado por primera vez por el alemán Alfred Wegener, principal autor de la teoría de la deriva continental, en 1912. Procede del prefijo griego "pan" que significa "todo" y de la palabra en griego "gea" "suelo" o "tierra" (Γαῖα Gaĩa, Γαῖη Gaĩê o Γῆ Gễ). De este modo, quedaría una palabra cuyo significado es "toda la tierra".
Se cree que la forma original de Pangea era una masa de tierra con forma de "C" distribuida a través del Ecuador. Ya que el tamaño masivo de Pangea era muy amplio, las regiones internas de tierra debieron ser muy secas debido a la falta de precipitación. El gran supercontinente habría permitido que los animales terrestres emigraran libremente desde el Polo Sur al Polo Norte. Al extenso océano que una vez rodeó al supercontinente de Pangea se le ha denominado Pantalasa (Panthalassa).
Se estima que Pangea se formó a finales del período Pérmico (hace aproximadamente 300 millones de años) cuando los continentes, que antes estaban separados, se unieron formando un sólo supercontinente rodeado por un único mar.


Las líneas marcadas sobre Pangea señalan las masas de tierra que se separarían para formar los continentes actuales.

En la Formación Jaramillo que forma parte de la Cuenca Tepuel-Genoa, solo hay fósiles vegetales de Gimnospermas y de improntas que corresponden a los períodos Carbonífero y Pérmico. También se encuentran fósiles de bivalvos y de Gasterópodos del Carbonífero bajo, mientras que del Carbonífero medio alto se encuentran fósiles de invertebrados braquiópodos y de bivalvos que son los más abundantes. Del Pérmico hay una cronología relativa derivada de la estratigrafía, bastante completa. Del nivel más bajo del Pérmico aparece un braquiópodo univalvo y ya en el siguiente nivel se encuentran fósiles de un braquiópodo bivalvo. De esta forma, por la diferente antigüedad de los fósiles, se va armando la edad relativa de cada estrato sedimentario. Lo curioso es que en todos los casos, los fósiles corresponden a especies que desarrollaban en aguas de bajas temperaturas. Hay braquiópodos que aparecen en estos sitios de Patagonia y también en Siberia y en Yukón (Canadá) por lo que se especula con una conexión austral-boreal y con grandes similitudes con los fósiles del NE de Asia para esos mismos períodos geológicos.
Como decíamos, la mayor cantidad de fósiles e improntas de plantas corresponden al Pérmico inferior y se encuentran el la Cuenca Tepuel-Genoa. En este caso se trata de flora de zonas cálidas, especialmente improntas de helechos que se encuentran sobre lajas.

Helecho (Carbonífero)

Al respecto hay una teoría de que la Patagonia era un Continente Alóctono (aislado) que migraba independientemente hasta que colisionó con el Continente Americano en el Paleozoico aproximadamente en la línea actual de los ríos Barrancas y Colorado, al sur de la Pcia de la Pampa.

El Período Jurásico (200-250 millones de años) es de mucha importancia por los depósitos fósiles del ecosistema terrestre de Paso de Indios y Cerro Cóndor. En la Cuenca de Cañadón Asfalto (centro de la Pcia de Rio Negro y de Chubut) hace 170 millones de años, había un ambiente fluvial-lacustre con elevadas temperaturas. Este ambiente sufrió el impacto del vulcanismo explosivo con grandes depósitos piroclásticos y de ceniza volcánica provenientes de la zona andina. Pero no nos anticipemos demasiado; en el Jurásico se comienza a separar Pangea migrando América del Norte de América del Sur, la Antártida y Australia. Se encuentran entonces muchas variedades de dinosaurios, pterodáctilos, anuros (ranas), cocodrilos, tortugas. Los dinosaurios habían aparecido en el Triásico pero se diversifican en el Jurásico hallándose una gran variedad en el posterior período Cretácico. Lo mismo ocurre con los mamíferos que adquieren diversidad durante el Jurásico.
En la formación Cañadón Asfalto (Cerro Cóndor) sobre la ruta 12, se encuentran rocas rojizas que delatan sedimentos de fondos lacustres con mucho material fósil de improntas vegetales y animales. Allí se encontraron los restos fosilizados de un nuevo dinosaurio Saurópodo que exitió hace 170 millones de años y que aún no tiene nombre, afín al Patagosaurus (herbívoro gigantesco). También se encontró un nuevo dinosaurio carnívoro de unos 8 m de largo, bípedo y afín a la familia de los Abelisauridos que unos 100 millones de años más tarde incluría al Carnotaurus que existió hace 70 mill de años. Las vértebras de este dino tienen un tejido esponjoso que no existe en los otros. También se halló un Heterontosaurio muy pequeño, un herbívoro de 70 cm cuya impronta quedó sobre una laja del fondo del lago. Tenía los dientes en disposición palmada, como un pico plano, se denominó Manidens condoriensis y está relacionado con dinos del sur de África que estaba cercana a Patagonia en tiempos de Gondwana (ver esquema de Pangea más arriba)
En la Sierra de Taquetrén hay una formación llamada La Leonera donde se encontró un dinosaurio fósil al que se denominó Leonesaurus taquetrensis, muy similar a los Saurópodos posteriores en el tiempo que conocemos más, pero era un animal cuadrúpedo enorme, de 30 m de longitud.
Del período Jurásico son los fósiles de troncos y conos de Araucaria Chubutensis y los helechos como Osminadopsis rafaelli.

El último período de la era Mesozoica fue el Cretácico, de 145 a 65 mill de años y sus fósiles existen en afloramientos de color blanco del Centro Norte de Chubut (Grupo Chubut, de 125 a 100 mill años) y verdosos del Grupo La Colonia de 85 a 65 mill de años. Por entonces se estaban separando América del Sur y la Antártida y se diferenciaban los actuales continentes.
En el Grupo Chubut hay fósiles de dinosaurios, tortugas y cocodrilos. Se hallaron dinos Saurópodos, herbívoros que caminaban en 4 patas y sus huevos fosilizados y también dinos Terópodos, carnívoros, que lo hacían en 2 patas como el Tiranotitán. Cocodrilos Barsinosuchus, Tortugas de agua dulce Prochelidilla y tortugas terrestres Chubutemys de 80 cm que tenían cráneos con cuernos.
En el Grupo La Colonia hay dinosaurios y mamíferos. Allí aparecieron los dinosaurios carnívoros denominados Carnotaurus, las tortugas de agua dulce Patagoniaemys (también con cuernos), mamíferos pequeños y dinosaurios marinos como los Plesiosaurios que tenían los miembros transformados en aletas natatorias. También hay fósiles vegetales como la flor de loto Nelumbo sp y conos de Araucaria e improntas en piedra de hojas de araucarias. Las Araucarias existentes hoy en nuestro país (Pehuén y Pino Paraná) sin dudas descienden de estas formas primitivas.

De la Era Cenozoica y su período Terciario, épocas Paleoceno (65 mill años) y Eoceno (56 mill años) se multiplican las especies de mamíferos que llenan el nicho ecológico dejado vacante por los dinosaurios tras su desaparición. Tenemos un buen registro fósil del Cenozoico en la Patagonia. En esta Era hubo un gran cambio climático a nivel global pero como Patagonia se desarrolló como una isla, el registro paleontológico está preservado. No existía aún la Cordillera (afloró hace 15 mill años) y era un ambiente húmedo y selvático similar al Brasil actual.
En Punta Peligro, al Sur de Comodoro Rivadavia, hay yacimientos fósiles del Paleoceno inferior y destacamos un marsupial y un ornitorrinco ingresados desde la Antártida en momentos en que la “isla” patagonica tocó ese continente.
En la Gran Barranca del lago Colhué Huapi (Eoceno – Mioceno inferior) aparecen marsupiales, xenartos (piches y peludos) y notoungulados. Hay roedores y también primates provenientes de Africa. Aquí trabajó Florentino Ameghino.
En la Laguna del Hunco (Eoceno medio) había un gran lago rodeado de bosques, la temperatura media era bastante alta y se encuentran improntas fósiles de gran variedad de plantas, inclusive de un Eucalipto patagónico hoy desaparecido (el Eucalipto moderno es originario de Australia).
En Bryn Gwyn se encuentran fósiles de roedores y ungulados; el ecosistema refleja los cambios debidos al vulcanismo (lluvia de cenizas) y al surgimiento de la Codillera hace 20 mill años. Se encuentran mandíbulas reforzadas, adaptadas a comer pastos más duros porque comenzaba a disecarse el medio.
En El Petiso (Mioceno medio) teníamos el Mar Paranaense que invadía todo el centro de America del Sur y también de la actual Argentina cubriendo la zona del actual VIRCH.
La nueva localidad fosilífera denominada "El Petiso", ubicada al Noroeste de la provincia del Chubut, ha brindado numerosos restos de mamíferos bien preservados, otros fragmentarios de tortugas, lagartos y aves y, además, una gran diversidad de trazas fósiles atribuibles a insectos. El material colectado, más de 600 ejemplares identificables, se encuentra depositado en el Museo Paleontológico Egidio Feruglio (Trelew). La unidad fosilífera comprende una exposición areal de aproximadamente 900 m2 y está formada por un potente paquete de toba limosa, masiva, de 10 metros de espesor.